viernes, 6 de junio de 2008

Francisca Duarte







Historia de Francisca DuarteA pocos kilometros de Santa María de Ipire, Estado Guárico se encuentra el Hato Barrialito el cual perteneció al Señor Natalio González Hurtado. En ese hato llegó a desempeñarse como trabajadora María Francisca Duarte a quien popularmente la conocen como Pancha Duarte (Anima del Taguapire); fue una mujer bondadosa, responsable, decente y de un carácter recio que no aceptaba el tuteo como fórmula de tratamiento. Cuentan los ancianos de la localidad y zonas adyacentes, que además de ser bondadosa era una excelente partera (comadrona, como las llamaban antes). Se dice que murió de paludismo, desconociéndose el día y año exacto de su muerte y que cuando la llevan a enterrar el caudal del río les impidio atravesarlo, por lo cual tuvieron que colocar el chinchorro donde la llevaban debajo de un árbol de taguapire. Al día siguiente cuando ya el río les permitía proseguir el camino no pudieron movilizar el cadáver porque éste estaba tan pesado que decidieron enterrarla al pié del árbol. De ahí que al ánima se le conoce como Anima del Taguapire. Este lugar se convirtió en parada obligada para los viajeros que transitaban por el lugar debido a que se convirtió en un ánima muy milagrosa. Se cuenta que el primer milagro se lo hizo a un llanero que iba de vaquería y el ganado se le extravió. Cansado de cabalgar el llanero decidió descanzar al pié del árbol de taguapire donde yacía el cadáver de Pancha Duarte y le ofreció que si el lograba recoger el ganado le haría un "cercao de palma" para que nadie la pisara. El milagro se le cumplió pero el llanero no regreso a cumplir la promesa hasta que una noche al pasar por el taguapire oyó una voz que le preguntaba por el "cercao de palma" que le había ofrecido. Asustado el llanero mandó a construirle un túmulo de ladrillos el cual vino a constituir el incio de lo que es hoy día la Capilla del Anima del Taguapire. A partir de allí esta milagrosa ánima es conocida tanto nacional como mundialmente.




Oración del Anima de Taguapire
¡Oh! Espíritu amantísimo, símbolo de la existencia del alma, a ti rogamos. Invocando al nombre del Padre, en nombre del Hijo y el nombre del Espíritu Santo, ser escuchados en nuestra súplica. Antes de apelar a tí en solicitud de tu intersección ante DIOS para recibir el Don de nuestra necesidad, nos permitimos recurrir a la misericordia infinita de Nuestro Señor Jesucristo para que nos perdone nuestros innumerosos pecados, manifestándole nuestro arrempentimiento y nuestro próposito de enmienda: asegurándote que todo lo que te pidamos ha de ser para bien nuestro, para bien de otros y solamente para el bien. ¡Nunca jamás para el mal!. Francisca Duarte espíritu amantísimo: a cambio del favor que recibamos por tu intersección ante DIOS, te prometemos que trabajaremos con los medios que nos sean dados, por la Gloria de Nuestro Señor y por la Gloria de tu propio espíritu.









Cuidanos Vieja Querida!!!